A Itaberlly Lozano, un joven brasileño de 17 años, lo mató la homofobia de su madre.
Itaberlly Lozano, fue descrito por sus tíos y abuela como un chico alegre y trabajador. Fueron esas las características que más destacaron los familiares. Pero no fue sólo para recordarlo como tal.
Lamentablemente tuvieron que usar estas características para contradecir a su propia madre, Tatiana Lozano, quien habría justificado haberlo asesinado alegando que consumía drogas y quiso atacarla a ella, a su pareja y a su hijo de 4 años.
Itaberlly llevaba tiempo de pelea fuerte con su madre porque esta no aceptaba que su hijo fuera homosexual; por lo cual se fue a vivir con la abuela. Ella lo llamó para “hacer las paces” y envió un auto a buscarlo. Poco sabía, Itaberllyque ella había contratado a dos jóvenes para que “lo recibieran” a golpes. Luego ella lo mató.
Desapareció desde año nuevo. Su madre intentó evitar los cuestionamientos diciendo que quizás se había ido con algún amigo. La policía encontró su cuerpo cerca de la autopista José Frahonei, Cravinhos, en São Paulo.
Pero nadie pudo reconocerlo por el daño que le habían causado quemándolo. Así que los familiares lo reconocieron por la pulsera que siempre usaba.
Su madre y la pareja fueron detenidos y esperan juicio. La defensa alegará que fue en defensa propia.
Así termino la corta vida de Itaberlly, con la violencia física a la que arrastra la homolesbotransfobia a muchas personas de la comunidad LGBTI.
El caso de Itaberlly no es un caso aislado. Responde a las sistemáticas agresiones que sufre el conjunto de la diversidad sexual y tiene como objetivo reprimir hasta el silencio las sexualidades que no se adaptan a la norma.
Si bien el mundo ha progresado con varios países aprobando el matrimonio igualitario, la igualdad ante la ley no es la igualdad ante la vida, la violencia del machismo y la homolesbotransfobia sigue cobrándose las de muchos jóvenes como Itaberlly.
Es preciso organizarnos y luchar contra la desidia de los Estados y los discursos de la Iglesia que le dan un sustento ideológico a la violencia machista y homofóbica.
Fuente: La Izquierda Diario.