Hay un nuevo movimiento sucediendo entre los evangélicos.

“He aquí”, dice Dios por medio del profeta Isaías: “yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad”.

El viejo movimiento se basaba en la exclusión de gays y lesbianas de la iglesia, usando la Biblia de forma idolatra, degradándolos y rechazándolos. Pero ahora los evangélicos están despertando a lo nuevo que Dios está haciendo en el mundo. Afortunadamente, más evangélicos están percibiendo que Dios está haciendo un camino en el desierto y ríos en la soledad para nuestros hermanos y hermanas gays y lesbianas.

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Tony Campolo es profesor emérito de sociología en la Universidad de Oriente, un ex miembro de la facultad en la Universidad de Pennsylvania, y el fundador y presidente de la Asociación Evangélica para la Promoción de la Educación.
Tony Campolo ha escrito más de 35 libros que han inspirado jóvenes y generaciones de todo el mundo. Él y su esposa Peggy viven cerca de Filadelfia,EE.UU.

Tony Campolo es el último evangélico en salir del armario para apoyar la plena inclusión de gays y lesbianas en la iglesia. Él publicó un comunicado en su página web ayer que creó un gran revuelo entre los evangélicos.

Termina su declaración diciendo: “Espero que lo que he escrito aquí ayude a mis hermanos cristianos a acoger con amor a todos nuestros hermanos y hermanas gays y lesbianas en la iglesia”.

Tony Campolo es una importante voz en el evangelismo americano y señala lo nuevo que Dios está haciendo dentro del movimiento evangélico. Pero hay los que quieren aferrarse a la vieja forma de exclusión.

Un crítico afirma sobre la aceptación de gays y lesbianas por parte de Campolo: “Es significativo que otro prominente líder se aleje de la fe una vez dada por los santos”. Y que el cristianismo estadounidense esté pasando por un proceso de eliminación que “revelará cuales conciencias están ligadas la autoridad de las Escrituras y cuáles no”.

Este crítico golpea el clavo en la cabeza. Sin quererlo, revela la misma cosa que está mal en la antigua versión del evangelicalismo. Afirmar que la aceptación de los gays y lesbianas en la iglesia es alejarse “de la fe una vez dada por los santos” es ridículo.

¿Sabes cuantos de los santos hablaron explícitamente acerca de los gays y las lesbianas? Cero. En toda la Escritura, en toda la escritura de los antiguos padres de la iglesia, las palabras gay, lesbiana, bisexual, transexual, ¡diablos!, ni siquiera la palabra homosexualidad aparece en el hebreo o el griego. Cualquier traducción moderna de la Biblia o iglesia antigua que al escribir use esas palabras no es una traducción literal. Es una interpretación.

Estoy a favor de las interpretaciones. Tenemos que interpretar la Biblia. De hecho, no hay una interpretación literal del texto, por lo que las personas de fe siempre han estado debatiendo el significado de las Escrituras.

El punto es que tenemos que asumir la responsabilidad de nuestra interpretación de la Escritura, que es lo que está haciendo Campolo. Después de todo, sabemos que el diablo puede citar las Escrituras, tanto como cualquier otra persona. ¿Y cuál es el papel del diablo en las Escrituras? Como René Girard nos ha enseñado, el nombre de Satanás significa acusador. El papel de Satanás es dividir a la humanidad a través del principio de la acusación. Cada vez que alguien apunta con el dedo a otra persona o grupo de personas, para excluirlos, puedes estar seguro de que están siendo influenciados por el principio satánico de la acusación. Para muchos de nosotros, se está volviendo anticuado.

Es por eso que estoy agradecido por lo nuevo que Dios está haciendo. Lo nuevo es resumido por Jesús cuando habló del Parakletos. El Parakletos  es el Espíritu Santo. Curiosamente, la palabra Parakletos significa “llamado a lado de alguien ” y tiene connotaciones de “abogado o ayudante”.

La distinción entre Satanás y el Espíritu Santo no podría ser más evidente. El papel de Satanás es acusar a la gente de ser mala. Satanás usará cualquier recurso disponible para hacer esa acusación, incluyendo la Biblia. Cuando usamos la Biblia como un medio para acusar a otros de inmoralidad, hemos convertido la Biblia en un ídolo satánico. El Espíritu Santo, por otro lado, se encuentra con los que son acusados por el principio satánico de la acusación. El Espíritu Santo no usa la Biblia para acusar o excluir personas; ese es el trabajo de Satanás. El Espíritu Santo usa la Biblia para llevarnos lejos de acusar a nuestros vecinos y para guiarnos a amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos.

Pero no quiero acabar con la moral. Los evangélicos tienen razón para estar preocupados acerca de ella. Pero debemos preocuparnos por la moral de la forma en que Jesús se preocupaba por la moral. Jesús no usó los principios morales o religiosos para acusar a aquellos que la élite religiosa consideraba inmorales. Más bien, Jesús volcó la moralidad sobre sus cabezas. Para Jesús, la moral se trataba de pararse al lado de aquellos que eran acusados de ser pecadores. Él tuvo compañerismo con ellos, no para cambiarlos, sino para amarlos tal como eran. Amar a los demás tal como son. Esa es la esencia de la moral cristiana.

Tony Campolo está siendo movido por el Espíritu Santo. Él nos muestra cómo ser un cristiano moral. Él seguirá calentando las cosas para hacerlo. Y eso está bien. Él continuará, espero, amando incluso a sus enemigos.

Estoy agradecido de que otros evangélicos hayan descubierto lo nuevo que Dios está haciendo. Oro para que muchos más hagan lo mismo.

 

POR ADAM ERICKSEN

Fuente original: www.patheos.com